Las mujeres que hacen brillar el sol

Las mujeres que hacen brillar el sol

Cada día, en el campo solar Chañares en el desierto chileno de Atacama, un grupo de mujeres trabaja en el cuidado de los paneles que componen la mayor planta fotovoltaica de Enel Green Power

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Cada día, en el campo solar Chañares en el desierto chileno de Atacama, un grupo de mujeres trabaja en el cuidado de los paneles que componen la mayor planta fotovoltaica de Enel Green Power.

Son mujeres de las comunidades locales que trabajan en una de las micro-empresas que nacen con el apoyo de Enel para proporcionar muchos de los servicios necesarios para el funcionamiento de las plantas de energía renovable que hemos construido.

 

La atención al detalle

En el desierto de Atacama las temperaturas y el viento alcanzan niveles elevadísimos. Uno de los principales problemas para el mantenimiento de los sistemas solares es preservarlos de la arena que continuamente se deposita sobre los paneles.

La limpieza de los módulos solares es un trabajo que requiere atención, paciencia y atención al detalle. Hemos involucrado a algunas mujeres de la comunidad local, enseñándoles el uso de maquinaria de limpieza y mantenimiento técnico.

“Tenemos la oportunidad de trabajar en un campo que es generalmente para los hombres. Y las mujeres podemos hacer el mismo trabajo pero con más atención a los detalles y sutilezas”
Elizabeth Escudero Diaz, técnica de mantenimiento fotovoltaico de Chañares
 

Crecer juntos

La participación de las comunidades locales es una prioridad para nosotros. Traemos energía limpia y desarrollo con la inquietud de crear valor compartido que se traducirá en mejores condiciones de vida, oportunidades de empleo, protección del medio ambiente.

“Un territorio tiene una historia, un equilibrio pre-existente a nuestra llegada. Debemos tener en cuenta cómo nuestras acciones, nuestras plantas y nuestros proyectos encajan en este equilibrio sin romperlo”
Antonella Pellegrini, Sustainability area manager Enel Green Power América Latina

El campo solar de Chañares, así como la planta híbrida Ollagüe, son ejemplos de cómo nos ponemos al servicio de la población local de Chile que, incluso en el pasado reciente, ha sufrido la presencia de industrias y empresas como una invasión forzada.

La confianza mutua y la cooperación con las comunidades locales son los pilares de un intercambio de intenciones que se alimenta y crece para dar forma al bien común.

La sostenibilidad es una parte integral de nuestra forma de ser y de actuar comenzando por el diseño de la planta, caracteriza su construcción y continúa durante todo el período de actividad.

 

El distrito de energía limpia

La planta fotovoltaica de Chañares es parte del distrito de las renovables que Enel Green Power está desarrollando en el norte de Chile, en la región de Antofagasta, entre el Océano Pacífico y los desiertos al pie de los Andes.

Nuestro centro de renovables en el norte del país ya cuenta con seis campos solares en servicio a los que se añadirán un parque eólico y dos plantas de récord, actualmente en construcción: la nueva planta de energía geotérmica Cerro Pabellón – la primera de esta tecnología en todo el continente latinoamericano - y el parque solar Finis Terrae, que con sus 400 GWh porl año se convertirá en el más grande de Enel Green Power en el mundo.

“Para nosotros lo más importante es que la compañía conozca nuestras tradiciones, nuestras costumbres. Queremos que valoricen el esfuerzo que estamos realizando, así como nos dan la oportunidad de seguir adelante.”
Soledad del Carmen Bautista, auxiliar de limpieza planta Cerro Pebellón

Actualmente nuestra presencia en todo el país latinoamericano resulta en una capacidad instalada total de cerca de 700 MW, de los cuales 340 MW de energía eólica, 253 MW de energía solar fotovoltaica y 92 MW de hidroeléctrica. A estos hay que agregar los proyectos en ejecución por más de 500 MW que, una vez completados, darán lugar a una capacidad total instalada de unos 1.200 MW.