Plan Estratégico Enel 2019-2021: el futuro renovable

Plan Estratégico Enel 2019-2021: el futuro renovable

El 20 de noviembre, el Consejero Delegado y Director General de Enel Francesco Starace y el CFO Alberto De Paoli presentaron a la comunidad financiera y a la prensa el Plan Estratégico 2019-2021 del Grupo.

Existe una nueva energía en el mundo. Una energía renovable, hecha de digitalización, de tecnología y de atención al cliente, que permite la creación de valor sostenible. De este tipo de energía, que ya no es un producto que se genera y se distribuye, sino un habilitador de desarrollo, Enel es líder y trabaja todos los días en los países en los que opera para continuar con su liderazgo.

Esta es la síntesis de la presentación del Plan Estratégico 2019-2021 que se hizo a inversores y analistas financieros, realizada por el Consejero Delegado y Director General de nuestro Grupo, Francesco Starace, y el Director de Administración, Finanzas y Control, Alberto De Paoli, en el Capital Markets Day 2018 del pasado 20 de noviembre, en el hotel Excelsior Gallia de Milán. Un evento sostenible, como destacó Monica Girardi, Directora de Relaciones con Inversores.

 

Los récords de Enel

Francesco Starace comenzó ilustrando las características que demuestran el liderazgo de Enel en el sector energético global: el Grupo es el primer operador de red, con 73 millones de usuarios finales; posee la red de clientes privados más grande del mundo, con 64 millones (gas y energía); y es el primer grupo privado de renovables, con 43 GW de capacidad instalada.

Los pilares estratégicos retoman y refuerzan los conceptos del plan anterior: en primer lugar, el crecimiento industrial, con una previsión de inversiones de 27.500 millones de euros (+12% respecto al plan anterior), enfocados en el desarrollo de las renovables, la flexibilidad, la calidad y la resiliencia de las redes e infraestructuras para las grandes áreas urbanas, como la fibra óptica, la iluminación inteligente y las redes de recarga para coches eléctricos; además, la continuación del programa de eficiencia operativa, que permitirá un ahorro de 1.200 millones de euros, mientras que la simplificación de las estructuras empresariales junto con una política de rotación de los activos permitirá maximizar el valor del Grupo, optimizando el equilibrio entre riesgos y oportunidades. En su totalidad, el enfoque sigue apuntando a la participación de las comunidades locales y de las personas que forman parte de Enel.

Un modelo de desarrollo integrado, orgánico y totalmente diversificado, donde la digitalización cumple un rol importantísimo y que, como confirma nuestro Consejero Delegado, fue concebido para “obtener la máxima eficiencia, asegurar un crecimiento industrial y socioeconómico sostenible a largo plazo y compensar ampliamente la volatilidad del mercado”.

“Las macrotendencias relacionadas con el desarrollo tecnológico —continuó Starace— están dando forma a una transición energética a nivel global. Este será el año de la electrificación, un fenómeno que, junto con la urbanización, está generando enormes oportunidades, y nosotros estamos completamente listos para satisfacerlo”.

Por eso, el Grupo decidió comprometerse con dos nuevos ODS (objetivos de desarrollo sostenible de la agenda de las Naciones Unidas para el 2030): se trata de los números 9 y 11, que se refieren, respectivamente, a la industria, innovación e infraestructura, y a las ciudades y comunidades sostenibles.

Por lo tanto, Enel X cumple con el rol fundamental en lo que se refiere a la innovación tecnológica y los nuevos productos y servicios digitales. Esta sociedad del Grupo, fundada hace un año, se concentrará cada vez más en su propia oferta de productos y servicios, entre ellos, los de respuesta a la demanda y almacenamiento de energía, sistemas inteligentes para la iluminación pública, redes nuevas de fibra óptica para las grandes ciudades, además de una vasta red de 455.000 puntos de recarga para apoyar la difusión de la e-mobility.

“En los últimos cuatro años nos hemos vuelto más fuertes —explicó la Presidenta de Enel Patrizia Grieco—: hoy somos el número uno en energías renovables, el primer operador de red en el mundo y también los líderes en tecnología e innovación. Para los próximos tres años hemos incrementado nuestro capex de crecimiento en un 12%, llevándolo a 27.500 millones de euros, confirmando así nuestro compromiso con un crecimiento sostenible”.

 

Los nuevos ODS y la creación de valor compartido

En cuanto a los ODS (que, como recordó Francesco Starace, “son el centro de nuestra estrategia basada en la creación de valor compartido”), continúa nuestro firme compromiso de alcanzar aquellos en los que nuestro Grupo ha centrado su atención en el último trienio: el número 4 (Educación de calidad), el 7 (Energía asequible y no contaminante, para mil millones de personas en el mundo que aún no tienen acceso), el 8 (Trabajo decente y crecimiento económico) y, sobre todo, el 13 (Acción por el clima, con la reducción de emisiones específicas de CO2 para combatir los riesgos relacionados con el cambio climático).

De hecho, Enel ha previsto para los próximos tres años fuertes inversiones en el sector de las renovables: el 64% de los 16.500 millones de euros asignados al crecimiento industrial hasta el 2021 serán para las energías limpias. Por lo tanto, el peso de las renovables en estos tres años aumentará del 45 al 55 % del total instalado, consolidando así la posición del Grupo como líder global en el sector de las energías limpias.

“Este año hemos aumentado las inversiones de las renovables por dos razones importantes —explicó Alberto De Paoli—: la primera, porque estamos verificando un cambio radical en nuestro negocio, una firme tendencia de las economías hacia la descarbonización; la segunda razón es que queremos tener un contacto cada vez más directo con los clientes, pues ellos son cada vez más sensibles a este tema. Nos estamos moviendo rápidamente porque pensamos que el tiempo cumple un rol fundamental a la hora de operar mejor en esta nueva tipología de mercados prometedores”.

Al mismo tiempo, se prevén inversiones consistentes con el fin de aumentar el valor de los activos, reforzando la resiliencia y la flexibilidad de las redes y de las plantas de generación gracias a la aplicación de tecnologías digitales de última generación.

Por eso, se ha previsto un aumento importante del rendimiento en el capital invertido que, junto con una considerable disminución del riesgo de negocio, permite al Grupo mantener una política de dividendos basada en un pago del 70% e introducir por primera vez un dividendo mínimo por la duración total del plan.

En conclusión, el plan pone en armonía un crecimiento estable y la necesidad (imprescindible a estas alturas) de preservar el medio ambiente y crear valor sostenible a largo plazo para la empresa. Sin olvidar, como destacó Francesco Starace al finalizar su intervención, que “nuestra estrategia está y estará siempre centrada en la participación de las personas, tanto aquellas que trabajan para la empresa como los clientes: nuestro capital más valioso es el capital humano”.