La liviandad sostenible de la energía

La liviandad sostenible de la energía

Descubre todas las soluciones sostenibles para la energía en el centro del quinto EnelFocusOn en Madrid con Alexis C. Madrigal

Con la revolución industrial, la energía ha cambiado el mundo para siempre y, desafortunadamente, en poco más de un siglo también lo ha vuelto insostenible. A este punto, cambiarlo de nuevo, regresando por lo tanto a la sostenibilidad que se perdió, es algo que sólo puede hacerse a través de la energía.

Estas son, en resumen, las conclusiones a las que se llegó el 14 de noviembre en el #EnelFocusOn de Madrid, la quinta ronda de reuniones globales organizadas por nuestro Grupo para debatir cuestiones relacionadas con el futuro, innovación y, sobre todo, sostenibilidad.

Soluciones sostenibles para la industria energética” era precisamente el título de esta edición, que siguió a las de Roma, Londres, San Francisco y Nueva York, con la conducción de Alexis C. Madrigal, periodista de la revista estadounidense The Atlantic, experto de energía renovable y autor del ensayo “Powering the Dream. The History and Promise of Green Technology”.

La mayor habilidad de los periodistas como él, dijo Madrigal a la audiencia de veinte influencers llegados de Europa y América del Sur, es hacer preguntas. Por lo tanto el discurso estuvo marcado por una serie de interrogativos. El primero: ¿cómo podemos superar nuestras ideas obsoletas sobre la energía renovable y la sostenibilidad?

“La crisis del petróleo en la década de 1970 y el embargo a la Opep nos hicieron comprender por primera vez que los recursos del mundo no son infinitos”, continuó el periodista. “En los años 70, el concepto de energía renovable y por lo tanto sostenible se asociaba con los movimientos de la contracultura, personas que se encontraban fuera del sistema, con un aire vagamente hippy como los trascendentalistas, o los tool freaks maníacos de la eficiencia tecnológica, que por lo tanto se consideraba con una cierta sospecha. Sin embargo muchos de ellos, ni siquiera dos décadas más tarde, iban a ser los que prácticamente arrojaron las bases del web como lo conocemos ahora”.

Si analizamos la relación entre la energía y los años 70, y la superponemos a la actual para tratar de resolver los problemas, la mejor lección que podemos extraer de ese período, según Madrigal, se puede condensar en cuatro puntos. Primero, ha llegado el momento de un cambio planetario. Segundo, las herramientas mentales y digitales pueden conducir a cambios radicales en el mundo físico. Tercero, un esfuerzo serio de investigación y desarrollo por parte de las empresas es crucial para el avance de la energía renovable. Cuarto, es importante enfocarse no tanto en nuestras necesidades, cuanto en cómo satisfacerlas con la menor cantidad de energía posible. Obviamente se trata de la energía que se puede medir con un contador.

Otra pregunta que debemos seguir haciendo para poder imaginar y así dar forma a un futuro mejor es: ¿cómo cambiarán nuestras ideas sobre las casas y los medios de transporte en un mundo digital?

“Las casas se volverán rápidamente cada vez más porosas”, afirma Madrigal, “en el sentido de que entrarán y saldrán cada vez más cosas”. La energía, por ejemplo: la que se producen en exceso los paneles solares de alta eficiencia instalados en los techos se puede almacenar y reingresar a la red, revendiéndola a las compañías eléctricas. Las viviendas se diseñarán para tener un impacto mínimo en el medio ambiente, o mejor aún para ayudar a preservar los recursos: en California, donde vivo, el estado quema grandes cantidades de energía para bombear volúmenes de agua gigantescos desde el norte hasta los condados del sur. Si todos en el sur tuviéramos una casa con un techo como el que nos cubre hoy, ahorraríamos mucho dinero”.

Madrigal se refería al edificio de Endesa, la compañía de nuestro Grupo, que es el líder del mercado eléctrico en España, y que alojó este #EnelFocusOn. La construcción, un verdadero monumento a la sostenibilidad arquitectónica (ha sido galardonado con la triple certificación de eficiencia energética, gestión ambiental y calidad del aire interior) tiene, entre las varias características que lo destacan, un techo inclinado con un sistema colector de agua de lluvia que se reutiliza para irrigar el entorno verde.

En cuanto a cómo va a cambiar, o cómo ya está cambiando, nuestra concepción del transporte, Madrigal presentó un ejemplo personal: “Hasta hace un tiempo, iba a trabajar con mi coche de combustión tradicional: me llevaba hasta tres horas recorrer cuarenta kilómetros en el tráfico, era una pesadilla. Hoy utilizo una combinación de bike share y medios de transporte público, casi todos eléctricos: no contamino y le pongo mitad del tiempo”.

Madrigal cerró su discurso con una pregunta de nuevo referida a la movilidad y cómo esta será revolucionada por la inteligencia artificial. Como ejemplos de un futuro ya tangible, y llegado prácticamente a nuestras casas antes de que tuviéramos el tiempo de darnos vuelta para mirarlo, el periodista citó el servicio de taxis recién presentado en Phoenix, Arizona, y realizado por medio de automóviles sin conductor desarrollados por Google y los robots almacenadores de Amazon, capaces de mover los productos en estanterías con total autonomía, lo que da como resultado una logística más eficiente, pero sobre todo, ya que los robots pueden trabajar en la oscuridad, el beneficio de poder mantener las luces apagadas en los cobertizos, con el consiguiente ahorro de energía.

Sí, la energía es la palabra clave del futuro, concluyó Madrigal antes que iniciara el debate con los influencers y se trasladaran en los autos eléctricos de Endesa al espacio de The Cube, donde los invitados pudieron visitar nuestro nuevo Enel Innovation Hub, dos días antes de la inauguración.

“La energía es la clave, y es crucial que la gente lo entienda, que entienda que las renovables son una realidad que funciona bien y es eficiente. Es algo que Enel ha entendido y englobado, transformándolo en una filosofía empresarial. Todos deberíamos hacer lo mismo, pero lamentablemente nunca pensamos seriamente en la energía. Sólo lo hacemos cuando apretamos el interruptor y la luz no se prende”

– Alexis C. Madrigal, periodista, experto en energías renovables